La América.
Somos un equipo de personas muy diverso con un objetivo muy simple.
Venir a trabajar cada mañana con ganas.
Para eso, encontramos en el pensamiento estratégico, la tecnología, el diseño y la comunicación una excusa para conseguirlo.
La independencia.
No depender de nadie nos permite tener nuestras propias reglas.
Y la primera y más importante es el Respeto.
Respeto por nosotros mismos y por cada uno de los que integran La América.
Respeto por nuestros clientes.
Por lo que hacen y pueden aportar.
Respeto por el trabajo que hacemos, siendo profesionales, estudiosos y modernos.
Entiéndase por modernidad, a la capacidad de adaptarse a los cambios.
El trabajo.
Cada cosa que hacemos debe ser especial, memorable y efectiva.
Con un sistema horizontal y muy colaborativo, buscamos ideas potentes que hagan realidad esa ambición.
La honestidad.
No hay intermediarios de ninguna clase en La América.
Creemos en las relaciones simples, directas y frontales.
Las cosas no se esconden ni se maquillan.
Se dicen y se resuelven.